Una vez más les dijo: ‘La paz sea con ustedes. Como el Padre me envió a mí, así yo los envío a ustedes’. Entonces sopló sobre ellos y les dijo: Reciban al Espíritu Santo.
Juan 20:21-22. NTV.
Lectura: Juan
20:19-23. Versículos del día: Juan
20:21-22.
MEDITACIÓN DIARIA
Después de su
resurrección el Señor va a los suyos para reconfortarlos y animarlos con su
Presencia. Él fue enviado por el Padre para cumplir una misión aquí en la
tierra: dar salvación a la humanidad caída y ahora les transmite a sus
discípulos esa misma comisión, dándoles el poder de hacerlo a través del
Espíritu Santo.
A lo largo de todo el
Evangelio de las Buenas Nuevas, vemos el énfasis que el Señor forja para
transmitirnos lo que también tenemos que hacer, si nos llamamos sus discípulos
(Mateo 10:5-6; Mateo 28:19; Juan 15:16; Hechos 1:8; 13:46-47; 28:28). Y más
tarde el apóstol Pablo lo repitió para que seamos conscientes de la importancia
de compartir y llevar salvación a los gentiles, que somos todos nosotros (Romanos
10:8-10 y 18; Efesios 2:17; Colosenses 1:23).
Amado Señor: los
tiempos actuales no son nada buenos y Tú nos has venido exhortando para que
salgamos de nuestra zona de confort y vayamos a dar el mensaje de salvación a
muchos que están errados y van por el camino equivocado. Ciertamente Tú
produces el querer como el hacer; llénanos de tu Santo Espíritu para que dejemos
toda timidez y miedo alguno y nos dediquemos con más ahínco a compartir tu
Palabra. Pon Tú en nuestras bocas las palabras necesarias para que el caído
entienda, se le revele su pecado y se arrepienta de corazón sincero. Gracias
bendito Señor por mostrarnos lo que en verdad esperas de cada uno de nosotros.
¡Te alabamos y damos honor a Ti, Señor y Dios Salvador!
Un abrazo y bendiciones.
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