Entonces oro a ti, oh Señor, y digo: Tú eres mi lugar de refugio. En verdad, eres todo lo que quiero en la vida.
Salmo 142:5. NTV.
Lectura: Salmo
142:1-7. Versículo del día: Salmo 142:5.
MEDITACIÓN DIARIA
Muchas veces nos sentimos
solos, aunque estemos acompañados; nos encontramos apabullados, confundidos,
sin ánimo y completamente decaídos. Definitivamente en esas ocasiones, lo mejor
que podemos hacer es buscar el rostro de nuestro buen Dios. Él es el único a
quien podemos ir sin esperar los ‘peros’ y ‘contras’ de lo que le contamos. El
Señor es definitivamente nuestro refugio seguro, nuestra roca fuerte y nuestro
más alto escondite. El Señor está presto a escucharnos y también a consolarnos.
Nos da exactamente la porción de su Palabra que necesitamos y si tenemos que
llorar, no nos va a criticar; Él nos va a animar y a levantar.
Cuando te sientas
atribulado, no dudes en buscarle; siempre está disponible y nunca falla.
Señor Jesús:
gracias porque en Ti lo tenemos todo; gracias porque Eres el Gran Yo Soy; el
Amigo de confianza; Eres el Príncipe de paz que la das, no como la recibimos
del mundo sino de una manera que sobrepasa nuestro entendimiento. Gracias Señor
porque podemos acudir a Ti sin pensar que nos vas a defraudar o a tildar con tu
dedo. Gracias por darnos el consuelo que necesitamos y devolver en nosotros el
gozo de tenerte a nuestro lado. Gracias porque nos conoces perfectamente y sabes
de nuestras debilidades como también de nuestras fortalezas. Gracias, por estar
atento a nuestro llamado. ¡Te amamos Señor!
Un abrazo y bendiciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario