Los que confían en el Señor son como el monte Sión, que jamás será conmovido, que permanecerá para siempre.
Salmo 125:1. NVI.
Lectura: Salmo 125:1-5. Versículo del día: Salmo 125:1.
ORACIÓN
Sí mi Señor; como
el padre de aquel muchacho endemoniado, yo te digo lo mismo: -yo creo, pero ayúdame
a superar mi incredulidad-. Sí Señor, yo
creo, solo que mientras mi corazón dice: sí, la mente dice: no, no es posible.
Señor, Tú más que nadie conoces mi corazón y sabes que te amo, te busco y no
quiero alejarme de Ti, enséñame a depositar toda mi confianza en el Único capaz
de transformar vidas, sanar enfermos y resucitar muertos. Sé que tu Palabra es
verdad; no permitas que el enemigo me ataque y no me deje ver la victoria que
desde ya me has dado. ¡Aumenta mi fe bendito Señor! ¡La victoria es Tuya!
Un abrazo y bendiciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario