lunes, 7 de septiembre de 2009

Rey por siempre

¡Alégrate mucho, hija de Sión! ¡Grita de alegría, hija de Jerusalén! Mira, tu rey viene hacia ti, justo, salvador y humilde. Viene montado en un asno, en un pollino, cría de asna

Zacarías 9:9.

Lectura diaria: Zacarías 9:9-17. Versículo del día: Zacarías 9:9.

ENSEÑANZA

El profeta Zacarías anunció 516 años atrás, la entrada de Jesús a Jerusalén. La profecía se cumplió exactamente. Hoy sigue vigente esta palabra: “Mira tu rey viene hacia ti, justo, salvador y humilde”. El Salvador anunciado por los profetas, se hizo carne para ofrecerse como sacrificio vivo a la humanidad entera y hacer partícipe con Él, a todo aquel que cree en su nombre. “Mira que estoy a la puerta y llamo. Si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré, y cenaré con él, y él conmigo” (Apocalipsis 3:20). El Señor Jesucristo se dispone a cumplir la voluntad del Padre y cumple su plan mesiánico. El pueblo judío que lo proclamaba y le batía palmas como rey, lo esperaba como el gran libertador que los eximiría de la opresión romana sin entender que su primer papel era como el mesías sufriente que vendría a redimir al mundo. Este Jesús, salvador y humildemente montado en un burrito abre el camino para llegar al Padre. ¿Deseas hoy, oír su voz? ¿Quieres aceptar a este Rey, que vino a morir por ti? Este Rey es el santo Dios Todopoderoso, el que era y que es y que ha de venir (Apocalipsis 4:8). El que volverá nuevamente en todo su esplendor como el gran Rey de reyes y Señor de señores, pero que antes quiere cumplir contigo su plan de salvación. Si quieres hacerte partícipe de su cena, ábrele hoy tu corazón e invítale a vivir contigo. Por siempre reinará a tu lado y te dejará lista una morada, para cuando Él te llame a compartir su reino celestial.

Un abrazo y bendiciones.

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