Sé lo que es vivir en la pobreza y lo que es vivir en la abundancia. He aprendido a vivir en todas y cada una de las circunstancias, tanto a quedar saciado como a pasar hambre, a tener de sobra como a sufrir escasez.
Filipenses 4:12. NVI.
Lectura: Filipenses
4:10-13. Versículo del día: Filipenses
4:12.
MEDITACIÓN DIARIA
En el camino del
cristiano con el Señor tenemos épocas de desiertos secos y áridos, como también
épocas de lluvias con vientos apacibles junto a un sol esplendoroso. Entonces,
también yo personalmente, puedo decir igual que Pablo: Sé lo que es vivir en la
pobreza y lo que es vivir en la abundancia. He aprendido a vivir en todas y
cada una de las circunstancias”. Lo importante es como lo escribí en el
devocional de ayer, que lo resumí en el título: ‘Aprendiendo del
contentamiento’; porque el Señor nos dice, además, que demos gracias en toda
situación (1 Tesalonicenses 5:18). O sea, no solamente por las cosas buenas
como es el tenerlo todo. o por las situaciones malas como es no tener nada. “Todo
lo puedo en Cristo que me fortalece” (v. 13).
Amado Señor Jesús:
muchas gracias por tu gran amor para con nosotros, tus hijos. Gracias por tus
enseñanzas; sé que vendrán días de prosperidad, pero también sé el rumbo por
donde va este mundo caótico, lo cual se me une en mis pensamientos y me
pregunto, ¿qué pasará entonces? Por favor, mi Señor, dame una señal sobre lo
que te he venido preguntando en estos días. La verdad, yo estoy confundida,
pero algo que sí tengo claro, es que sea la situación que sea, será para darte
las gracias y decirte, haz tu voluntad mi Señor. Te entrego mis pensamientos,
mis deseos, mis proyectos y te doy infinitas gracias por ellos. Maneja tú mi
vida y guíame por tu senda sin soltarme de tu mano; tu fortaleza será mi
sustento. Muchas gracias, bendito Dios y Señor mío. ¡Te amo! ¡Aleluya!
Un abrazo y bendiciones.
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