Oren por la paz de Jerusalén; que todos los que aman a esta ciudad prosperen. Oh Jerusalén, que haya paz dentro de tus murallas y prosperidad en tus palacios.
Salmo 22:6-7.
Lectura: Salmo 22:1-8.
Versículos del día: Salmo 22:6-7.
ORACIÓN
Buen Señor y Dios:
mira la aflicción de los que elegiste en la antigüedad como tu pueblo. Ellos te
rechazaron bendito Señor, pero por ellos, los tuyos que no te recibieron,
también moriste en la cruz del Calvario. Permite buen Dios que sus ojos se abran
y te vean a Ti; que se arrepientan por haberte despreciado y no verte como el
Mesías prometido. Hoy vengo a clamar no solo por la paz de Jerusalén sino la de
todo ese pueblo. Han sido duramente atacados; sus bebés decapitados. ¡Tanta
violencia en el mundo Señor! ¡Tanta maldad e inmoralidad sexual ha llegado a
las puertas de este país! Mi Señor, yo solamente soy un gajo insertado en esa
raíz, también me alimento de la rica savia del olivo; sin embargo, con todo mi
corazón te clamo por esta pequeña pero poderosa nación que todavía tiene el
sello de tu propiedad. Perdona Señor todo rechazo de la juventud de ese estado;
perdona toda altivez que se haya levantado contra Ti, perdona a su clase dirigente
que ha olvidado sus raíces. Oro Bendito Dios por la paz no solo de Jerusalén
sino de toda esa tierra. ¡Que haya paz en sus ciudades y campos! ¡Gracias, gracias,
bendito Dios de Israel!
Un abrazo y bendiciones.
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