A ti te digo, levántate, toma tu camilla y vete a tu casa.
Marcos 2:11. NVI.
Lectura: Marcos 2:1-12.
Versículo del día: Marcos 2:11.
MEDITACIÓN DIARIA
Este fue el versículo que
me inspiró a levantarme muy recientemente de haberme hecho la cirugía del seno
por cáncer de mama. Recuerdo que había pasado una mala noche, pero logré convencer
a una amiga médica que me ayudara a levantar para ducharme y esperar a mi médico
cirujano. Al cerrar la puerta de mi habitación estaba colgado en esa parte de
atrás el versículo y yo entendí que era el mismo Señor el que me estaba
hablando, por consiguiente, hice todo lo posible por cumplir esa orden y así
sucedió.
Definitivamente el Señor
tiene muchas maneras de hablarnos. Tenemos es que estar atentos y sensibles a
su voz. Yo te animo a que lo escuches y si estás en una condición parecida,
recuerda que el Señor es el mismo ayer, hoy y por los siglos. Él no ha dejado
de hacer milagros; Jesús puede hacerlo de nuevo.
Amado Señor: hoy
te ruego por tanto enfermo que se encuentra en situaciones difíciles debido a una
enfermedad. Te pido humildemente que escuches su oración y te manifiestes con
un milagro de sanidad en su vida. De manera especial te pido por los enfermos
de cáncer, de pancreatitis, de infecciones urinarias, del corazón o de
articulaciones y huesos. Gracias buen Señor, porque Tú no dejas de mostrarnos
tu amor y benevolencia. No somos nada ni merecemos tu misericordia; sin
embargo, Tú nos continúas tratando con el perfecto amor Tuyo. Gracias, muchas
gracias, Señor y Dios nuestro. ¡Toda la honra, gloria y honor son para Ti, por
los siglos de los siglos!
Un abrazo y bendiciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario