Por eso, ahora voy a seducirla, la llevaré al desierto y le hablaré con ternura.
Oseas 2:14. NVI.
Lectura: Oseas 2:1-23. Versículo del día: Oseas 2:14.
MEDITACIÓN DIARIA
El versículo del día,
siempre me ha cautivado. Es como si el Señor tratara con sus hijos de una
manera muy tierna y amorosa, cuando se han olvidado de Él; exactamente, eso fue
lo que hizo Israel (vv. 1-13), pero ¿qué hace nuestro buen Señor? Con su
infinito amor y fidelidad, la atrae nuevamente hacia sus brazos. Igualmente, lo
hace con nosotros.
La verdad, ahora lo
entiendo muy bien para la nación de los Estados Unidos. Mi oración era que el
Señor permitiera, llegara al poder un presidente que hiciera volver a sus
gentes a aquel primer amor que sembraron los Padres peregrinos. Ya sabiendo el
resultado de las Elecciones, creo que es el momento de que USA, se deje seducir
nuevamente por aquel a quien en sus primeros años llamó su Señor: “Al llegar
ese día—dice el Señor—, me llamarás “esposo mío” en vez de “mi señor” (v. 16).
Si vamos al contexto de
la Biblia: la Iglesia, su Iglesia es la novia; y el Señor, el novio que regresa
a llevarla para las Bodas del Cordero en el cielo. Sí; que la tierra toda de los
Estados Unidos, se vuelva a su Señor y esté preparada para ese grandioso día y lo
llame también ‘esposo mío’.
Buen Señor Jesús:
gracias por revelar y poner en mi corazón, el orar por este tu pueblo que
también amas. Gracias porque con tu dulce ternura volverás a conquistarla para
Ti. Gracias porque ésta tu novia, estará dispuesta a llamarte ‘Esposo mío’. Bendito
Señor: los Estados Unidos de América te pertenecen; son tu pueblo. Gracias por
tanto amor ofrecido a esta bella nación. ¡Utilízanos en tu ora! ¡Te damos toda
la gloria y honra a Ti Rey de reyes y Señor y señores!
Un abrazo y bendiciones.
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