Puede ser que algunas personas nos contradigan, pero lo que enseñamos es la sana enseñanza de nuestro Señor Jesucristo, la cual conduce a una vida de sumisión a Dios.
1 Timoteo 6:3. NTV.
Lectura:
1 Timoteo 6:1-5. Versículo del día: 1
Timoteo 6:3.
MEDITACIÓN
DIARIA
Es
importante no dejarse llevar por falsas doctrinas. Si alguno enseña diferente a
lo que es la Palabra de Dios, inmediatamente hay que dejar ese lugar y buscar
una Iglesia de sana doctrina. El que se desvía y enseña lo que no es, demuestra
ser un orgulloso y egocéntrico; le parece que solamente lo suyo es lo que vale,
pasando por alto el mensaje del Señor Jesucristo. ¡Cuidémonos de esos lobos
rapaces! Hay incluso quienes van a las Iglesias con el fin de sacar a las
ovejas sinceras del redil del Señor. Ahí cabe el refrán de hace mucho tiempo en
la televisión colombiana: “Ojos abiertos y oídos despiertos”. Así tenemos que
estar frente a la verdadera fe.
Amado
Señor Jesús: gracias por tu Palabra que es verdad. Te rogamos bendito Jesús,
que a través de tu Santo Espíritu podamos discernir lo que está correcto o no,
cuando escuchamos una prédica. Mi Señor, queremos seguirte a Ti sin tener el
menor deseo de poner atención a lo que no se refiere a tu mensaje de salvación
y por ende a su práctica. Abre nuestros ojos y nuestro entendimiento para saber
atesorar en nuestro corazón las verdades que Tú nos transmites. Gracias, muchas
gracias. bendito Señor Jesús.
Un abrazo y bendiciones.