Estaban de pie junto a la cruz la madre de Jesús, la hermana de su madre, María la esposa de Cleofas y María Magdalena.
Juan 19:25. NTV.
Lectura:
Juan 19:16-27. Versículo del día: Juan 19:25.
MEDITACIÓN
DIARIA
Si
nos ponemos en el lugar de María, la madre del Señor, ver sufrir a su hijo tal como
le tocó vivirlo debió ser un cuadro muy conmovedor. Ahí se cumplió la profecía
de Simeón, referente a María, cuando llevaron a Jesús a presentarlo en el
templo: “En cuanto a ti, una espada te atravesará el alma” (Lucas 2:35 NVI). El
dolor que sentiría María es el dolor que parte completamente el corazón. Creo que,
como madre de Jesús, en verdad sintió que la espada le atravesaba el alma.
Bendito
Señor Jesús: no solamente María como madre Tuya sintió el dolor desgarrador al
verte humillado y crucificado en una cruz en medio de dos malhechores. Creo que
cada uno de nosotros, lo vemos de igual manera. Permite buen Jesús, que ese
dolor Tuyo nos sirva para entender todo lo que hiciste por el hombre pecador y
comprender hasta dónde llega la gracia Tuya, que tuviste que derramar tu propia
sangre en pago de nuestra deuda como pecadores. Todo lo hiciste por amor.
Gracias, muchas gracias, mi buen Señor Jesús. ¡Te amamos!
Un abrazo y bendiciones.
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