sábado, 25 de mayo de 2024

Nuestras oraciones suben a la presencia de Dios

 

Entonces vino otro ángel con un recipiente de oro para quemar incienso y se paró ante el altar. Se le dio una gran cantidad de incienso para mezclarlo con las oraciones del pueblo de Dios como una ofrenda sobre el altar de oro delante del trono. El humo del incienso, mezclado con las oraciones del pueblo santo de Dios, subió hasta la presencia de Dios desde el altar donde el ángel lo había derramado. 

Apocalipsis 8:3-4. NTV.


Lectura: Apocalipsis 8:1-5.  Versículos del día: Apocalipsis 8:3-4.


MEDITACIÓN DIARIA


Bueno, yo me quedé pensando sobre este capítulo del Apocalipsis que habla sobre el séptimo sello y las trompetas. El Señor sabe que no deseo alarmar a las personas; pienso que el Espíritu Santo le hablará a cada uno de acuerdo con su propósito y que sí debemos de estar alertas, pero con el temor reverente a Dios y no con el temor de lo que pueda pasar o suceder. Volví a repasar el texto y su Espíritu me llevó a los mensajes dados en los versículos del día. ¿Por qué? Porque son muy importantes las oraciones nuestras. No pensemos que estas se quedan en el camino y que nuestro Dios no las escucha; al contrario, las escucha y muy bien. Son tan importantes que suben hasta la presencia de Dios. No dejemos de orar y de interceder, así veamos las cosas color de hormiga.


Amado Señor: nos presentamos delante de Ti para implorarte por este mundo caído. Permite buen Dios que los que te conocemos llevemos un mensaje de amor, paz, dominio propio y de tu gracia derramada, para que los que no te conocen se puedan acercar a Ti, sin temor alguno y alcanzar la salvación. ¡Toda la gloria sea para Ti Señor y Dios nuestro!


Un abrazo y bendiciones.

No hay comentarios: