Y se escandalizaban a causa de él. Pero Jesús les dijo: —En todas partes se honra a un profeta, menos en su tierra y en su propia casa.
Mateo 13:57.
Lectura: Mateo
13:53-58. Versículo del día: Mateo
13:57.
MEDITACIÓN DIARIA
“En todas partes se
honra a un profeta, menos en su tierra y en su propia casa”. Esta frase dicha
por el Señor Jesús al regresar a Nazaret y predicar en la sinagoga, nos hace
pensar en el presente. Según relata
también Lucas este episodio y lo complementa, muchos admiraban las palabras de
Jesús (Lucas 4:21-22), pero al leerles Isaías donde habla de Él mismo, los
suyos no lo aceptan. Su vanagloria no les permite ni siquiera pensar que uno de
su pueblo se crea mejor que los eruditos de la ley y menos que se auto-denomine
como el Salvador prometido. Susurraban entre ellos: “¿No es acaso el hijo del
carpintero? ¿No se llama su madre María; y no son sus hermanos Jacobo, José,
Simón y Judas? ¿No están con nosotros
todas sus hermanas? ¿Así que de dónde sacó todas estas cosas? Y se escandalizaban a causa de él” (vv.
55-57).
Algo muy parecido
sucede en todos los ámbitos hoy día: la envidia es el mayor de los males y la
madre de todos los vicios. El ego sentado en el trono de cada persona no le admite
ver los triunfos ni los logros alcanzados por otros. El corazón orgulloso y
envalentonado no acepta que se encuentren otros por encima del suyo. El
cristiano tiene que estar preparado para que lo critiquen e incluso lo persigan
o martiricen. Quizá en el fondo lo que no nos deja avanzar es el pecado de
crítica y chisme. Meditemos y no menospreciemos ni hablemos mal de los que son
escogidos para predicar las Buenas de salvación. En primer lugar no somos
llamados a juzgar ni tampoco a ser piedra de tropiezo para los que en verdad
creen. Meditemos en ello.
Amado Señor: Te damos
gracias por ser parte de los de tu reino aquí en la tierra. Bien sabemos Señor
que tendremos oposición empezando por los nuestros y rechazo de muchos al
anunciar tu Palabra, pero enséñanos a mirar adelante y no voltear para atrás,
así nos maltraten y vituperen.
Un abrazo y
bendiciones.