Tú coronas el año con tus bondades, y tus carretas se desbordan de abundancia.
Salmo 65:11. NVI.
Lectura: Salmo
65:9-13. Versículo del día: Salmo 65:11.
MEDITACIÓN DIARIA
Sí, y siempre sí.
Frenéticamente es sí. Nuestro buen Dios a pesar de las vicisitudes de este año,
nos permitió gozar de sus bondades. No tengo más que palabras de agradecimiento
para Él. Ha sido un periodo maravilloso donde hemos visto su mano prodigiosa sosteniéndonos
en diferentes áreas de nuestra vida. Jamás nos hemos sentido abandonados o
solos en el letargo de un año que culmina con dolor para tantos.
El Señor supo mover sus
fichas para que estuviésemos con nuestros adorados muñecos en Colombia. Viaje
que también fue dado a raíz de una diligencia especial de mi esposo y tan
exacto todo, que con jugadas magistrales permitió en el tiempo puntual, el
matrimonio de nuestro Dany. Gracias por la esposa maravillosa que le diste. Sólo
Él sabe hacer las cosas excelentes. Su tiempo nunca es tarde. Nada, absolutamente
nada se ha salido de su control y por eso nuestro corazón está muy agradecido.
Seguramente también
tienes motivos para agradecerle en este 2020. Si estás leyendo este devocional,
ya puedes decir que Dios te ha dado la visión para hacerlo. Aprendamos a ser
agradecidos aun en lo más pequeño o cotidiano. Oremos:
Amado Señor: El
año culmina con tus bondades porque las vimos a diario en nuestras vidas y en
toda la familia. Muchas, muchas gracias buen Dios. Gracias por la salud,
gracias por el pan diario, gracias por el bienestar de nuestros hijitos, gracias
por el resto de familia que también nos acoge con cariño, gracias por los
hermanos de la Iglesia que interceden por nosotros, gracias por los amigos que
siempre están ahí. ¡Y cómo no darte las gracias a pesar de haber quedado mi
corazón tan triste, por la partida de esa mujer que me amó y cuidó como su hija!
Te doy las gracias porque sé que está allá en el cielo Contigo y sin dolor
alguno. La verdad, no merecemos tanto amor de tu parte. Gracias, gracias mi
Jesús. Siempre recordaremos este 2020 porque en medio de tanta tristeza para el
mundo, Tú nos guardaste, nos cuidaste como a la niña de tus ojos ¡Te amamos y
adoramos!
Un abrazo y bendiciones.