El amor ofrecido a las nuevas ovejitas del Señor

 Cuiden con ternura a los débiles. 

1 Tesalonicenses 5:14c. NTV.

Lectura: 1 Tesalonicenses 5:14-15. Versículo del día: 1 Tesalonicenses 5:14c.

MEDITACIÓN DIARIA

¡Qué hermoso como expresa esta versión la parte c del versículo 5, refiriéndose a los débiles! Y es que, de verdad, al débil en la fe hay que demostrarle el mismo amor que el Señor Jesús nos demuestra a todos. Recordemos que al principio somos como niños, mientras vamos creciendo y aprendiendo a caminar. En esa etapa es cuando más se necesita el apoyo de los demás cristianos, a la persona nueva que llega. Ofrezcámosle toda nuestra comprensión, ternura, paciencia y amor para que se sienta amado y aceptado entre la feligresía.

Señor Jesús: gracias por enseñarnos a dar el mismo amor, compasión y ternura que nos diste Tú, cuando decidimos aceptarte como nuestro Señor y Salvador. Gracias por tener el privilegio de conocer nuevas ovejitas de tu manada. Permite que podamos dirigirlas a fuentes de ricas aguas cuando tengan sed y llevarlos a lugares de delicados y verdes pastos a descansar, para que así tu Nombre sea Exaltado y otros más vengan a tu rebaño Que todo lo que hagamos sea para honrarte y glorificarte. ¡Te amamos buen Señor!

Un abrazo y bendiciones.

Gracias Señor por mis fuerzas renovadas

Aun los jóvenes se cansan, se fatigan, los muchachos tropiezan y caen; pero los que confían en el Señor renovarán sus fuerzas; levantarán el vuelo como las águilas, correrán y no se fatigarán, caminarán y no se cansarán”. 

Isaías 40:30-31. NVI.

Lectura: Isaías 40:25-31.  Versículo del día: Isaías 40:30-31.

MEDITACIÓN DIARIA

No lo dudemos; recurramos al Señor cuando ya las fuerzas no nos den más. El Señor es fiel y sus promesas se cumplirán.

Gracias, bendito Señor por la promesa que me das de que mis fuerzas se renovarán y levantaré vuelo como las águilas, corriendo sin fatigarme y caminando sin cansarme. Gracias porque también me dices que me refugié en Ti cuando me sienta muy cargada. Señor, te dije: -aquí estoy; necesito que me tomes en tus brazos y me vuelvas a infundir aliento de vida para proseguir el camino que aún me falta por recorrer-. Y Tú como mi Dios amoroso y misericordioso que Eres escuchaste mi clamor. Gracias, muchas gracias, mi buen Señor. Tú me dices que vaya a Ti cuando esté cansada y agobiada, eso hice porque bien sé cuánto te necesito; ¡Necesito tanto de Ti mi Señor! Gracias, mi Señor y Pastor; gracias porque me permites descansar en verdes prados, me haces reposar junto a corrientes de agua fresca. Gracias Señor, Tú Eres mi refugio seguro, mi fortaleza; Eres el Dios en quien confío. Sólo en Ti halla descanso mi alma; de Ti viene mi esperanza. ¡Te amo mi Señor, mi Dios, mi Todo!

Un abrazo y bendiciones.

Habla con Jesús y ábrele tu corazón

 Te pidió que le preservaras la vida, y le concediste su petición; los días de su vida se alargan para siempre.  

Salmo 21:4. NTV.

Lectura: Salmo 21:1-7.  Versículo del día: Salmo 21:4.

MEDITACIÓN DIARIA

Exactamente como el rey David, yo le pedí al Señor que me concediera la vida cuando tuve cáncer de seno y cuando me dio pancreatitis. Sé que solamente el Señor con su gran amor pudo sacarme de los lazos de la muerte. Comparto mi testimonio de vida, porque el Señor es fiel, amoroso y misericordioso; su gran amor perdura para siempre; Él es un Dios sanador.

Mira, el Señor está atento a tenderte los brazos; desea que te acerques a Él para poder demostrarte cuánto te ama y darte la vida eterna. Te ama tanto que no dudó en dar su vida por ti. Dios en su infinito amor, mandó a su Hijo Jesús al mundo para que muriera en nuestro lugar (Juan 3:16), ahí estabas incluido tú. Apocalipsis 3:20 dice: “¡Mira! Yo estoy a la puerta y llamo. Si oyes mi voz y abres la puerta, yo entraré y cenaremos juntos como amigos”. El Señor Jesús te está haciendo esa invitación; acéptala y permite que Él venga a morar contigo. Jesús será tu gran amigo y puedes hablarle con toda tranquilidad, tal como lo hacía el rey David. Ahorita puedes decirle con tus propias palabras que tome tu vida; yo te puedo sugerir una oración, pero si tu deseo es cambiarla, bien puedes; de lo contrario dile así:

Señor Jesús: gracias porque me amas; la verdad, no lo sabía, pero hoy lo entiendo y deseo abrirte la puerta de mi vida para que seas mi Señor y Salvador. Gracias porque moriste en la cruz por mis pecados, te pido perdón por ellos; toma el control del trono que yo manejo y hazme la persona que deseas que yo sea. Gracias por perdonar todos mis pecados y darme la vida eterna a tu lado. Gracias Jesús.

Un abrazo y bendiciones.

Es necesaria una relación con Dios Padre

Los que encubren sus pecados no prosperarán, pero si los confiesan y los abandonan, recibirán misericordia. 

Proverbios 28:13. NTV.

Lectura: Proverbios 28:1-14.  Versículo del día: Proverbios 28:13.

MEDITACIÓN DIARIA

El pecado corta la comunión con Dios; por eso es necesario confesar los pecados tan pronto se cae en ellos. Dios desea que siempre estemos en comunicación directa con Él, no le demos cabida al enemigo porque él es muy astuto y querrá que sigamos sin tener diálogo con el Señor. Miremos lo que nos dice el apóstol Juan en su Carta: “Si confesamos nuestros pecados, Dios, que es fiel y justo, nos los perdonará y nos limpiará de toda maldad. Si afirmamos que no hemos pecado, lo hacemos pasar por mentiroso y su palabra no está en nosotros” (1 Juan 1:9-10 NVI). Así que no nos dejemos engañar cuando caigamos y pequemos, porque en Cristo tenemos el perdón de pecados (Efesios 1:7).

Tú, que tal vez no conoces a Jesús como Señor y Salvador de tu vida, te sugiero que lo invites a morar contigo. para que puedas empezar a tener una relación directa con Dios Padre a través de su Hijo Jesús. Dios envió a Jesús al mundo para que viniera a redimirnos del pecado. Él se llevó en la cruz del Calvario con su muerte, todos los pecados de la humanidad. Ahora, solo nos basta reconocer este hecho para alcanzar la salvación. Si tú lo deseas, puedes hacerlo en este momento. Dile así:

Señor Jesús: yo reconozco que soy pecador y que viniste al mundo a pagar por toda mi culpa, Gracias por amarme tanto Jesús; entiendo que te necesito y por eso hoy deseo abrirte la puerta de mi vida para que seas mi Señor y Salvador. Toma el control del trono que yo manejo y hazme la persona que deseas que yo sea. Gracias por perdonar mi pecado, morir en mi lugar, permitirme tener una relación personal con el Padre Celestial y darme la vida eterna a tu lado. En tu Nombre Jesús, amén.

Un abrazo y bendiciones.

Pidamos en el Nombre de Jesús

 Cualquier cosa que ustedes pidan en mi nombre, yo la haré; así será glorificado el Padre en el Hijo. Lo que pidan en mi nombre, yo lo haré. 

Juan 14:13-14. NVI.

Lectura: Juan 14:8-14.  Versículos del día: Juan 14:13-14.

MEDITACIÓN DIARIA

Yo me pregunto, ¿por qué tantas veces no obtenemos lo que le pedimos a Dios? “No tienen, porque no piden. Y cuando piden, no reciben porque piden con malas intenciones, para satisfacer sus propias pasiones” (Santiago 4:2-3). Este puede ser un motivo y también puede ser, porque no está de acuerdo con su voluntad, que es buena, perfecta y agradable. El Señor sabe muy bien lo que nos conviene y si es algo que no nos va a servir, pues no se dará. El Señor busca siempre nuestro propio bien.

De todas maneras, mi postura es pedir en el nombre de Jesús y el Señor tomará la decisión de darnos o no lo pedido.

Amado Señor Jesús: te doy gracias porque sé que Tú tienes el control de mi vida y bien sabes lo que me conviene o lo que no me conviene. Gracias, bendito Señor, porque es tu Santo Espíritu dirigiéndome a toda verdad. No tengo motivo para desesperarme o atemorizarme; mucho menos tengo que cuestionarte. Bien sé que tu voluntad es buena, agradable y perfecta y que tus caminos no son los míos. Hazme entender bendito Señor tu perfecta voluntad y que agradecida y gustosa acate tus designios en mi vida. Gracias, muchas gracias, buen Señor y Dios.

Un abrazo y bendiciones,

El gozarme es tu obra mi Señor

Luego Nehemías añadió: -Ya pueden irse. Coman bien, tomen bebidas dulces y compartan su comida con quienes no tengan nada, porque este día ha sido consagrado a nuestro Señor. No estén tristes, pues el gozo del Señor es su fortaleza-. 

Nehemías 6:10. NVI.

Lectura: Nehemías 6:1-12.  Versículo del día: Nehemías 6:10.

MEDITACIÓN DIARIA

El versículo del día nos habla del tiempo en que los israelitas fueron repatriados a Judá y a Jerusalén, por el rey Nabucodonosor de Babilonia quien los había llevado cautivos. Dirigidos por Nehemías se construyó una muralla para defender a Jerusalén. Entonces el sacerdote Esdras leyó al pueblo el Libro de la Ley que el Señor, por medio de Moisés le había dado a Israel. Al oír las palabras de la Ley, la gente comenzó a llorar. El gobernador Nehemías, el sacerdote Esdras y los levitas que enseñaban al pueblo les dijeron: “No lloren ni se pongan tristes, porque este día ha sido consagrado al Señor su Dios. Luego Nehemías añadió: -Ya pueden irse. Coman bien, tomen bebidas dulces y compartan su comida con quienes no tengan nada, porque este día ha sido consagrado a nuestro Señor. No estén tristes, pues el gozo del Señor es su fortaleza-” (vv. 9-10).

Tomándolo para mí, el Señor ayer me llenó de un gozo indescriptible y tuve en mi mente todo el día la canción que dice: ‘el gozo del Señor, mi fortaleza es, y su gozo sin medida Él me da’. Así fue; su gozo fue sin medida; todo me parecía más hermoso, más fácil las labores que hice en el apartamento, hasta gocé mi baño diario y al final de la tarde veía tan bonito el apartamento, que creo era por lo mismo que yo percibía. De ahí, que por eso mi devocional de hoy. ^“Alégrense siempre en el Señor. Insisto: ¡Alégrense!” (Filipenses 4:4).

Amado Señor Jesús: muchas gracias porque sé que solamente Tú puedes traer gozo a los corazones. Mi Señor: lo que me das es una mezcla de felicidad, de regocijo y a la vez una paz que, en verdad, sobrepasa todo entendimiento. Gracias mi Jesús, solamente Tú, por tu gran amor y misericordia produces el gozo indescriptible al ver que todo lo que me rodea es solamente obra Tuya. Quiero adorarte mi Señor; quiero levantar Salmos a tu Nombre. Gracias, por permitirme un día conocerte; gracias por la persona que me llevó a tus pies, por las que has puesto a lo lago de mi vida cristiana para enseñarme, dirigirme e inclusive amonestarme cuando ha sido necesario. Nada se te ha escapado de todo lo escrito en tu Libro para mí. ¡Se me acaban las palabras porque no sé cómo expresar mi amor por Ti! ¡Gracias, muchas gracias mi Fiel Amigo, Señor y Redentor mío! ¡Te amo mi Señor!

Un abrazo y bendiciones.

Oremos por nuestros Pastores y Líderes

Amados hermanos, honren a sus líderes en la obra del Señor. Ellos trabajan arduamente entre ustedes y les dan orientación espiritual. Ténganles mucho respeto y de todo corazón demuéstrenles, amor por la obra que realizan. Y vivan en paz unos con otros. 

1 Tesalonicenses 5:12-13. NTV.

Lectura: 1 Tesalonicenses 5:12-13.  Versículos del día: 1 Tesalonicenses 5:12-13.

MEDITACIÓN DIARIA

Creo que con frecuencia se nos olvida orar por nuestros Pastores y Líderes; tampoco los honramos como debería ser. Este devocional es un llamado a todos los miembros de las diferentes Iglesias para que seamos más leales y amorosos con quienes tienen el cuidado espiritual de nosotros. ¿Cuántas veces los hemos visto cargados por diferentes situaciones? y la indiferencia nos mata. Quizá necesitan una palabra de aliento, una sonrisa, un pequeño detalle o simplemente un buen abrazo y ni siquiera esto ofrecemos. Recordemos que son personas como nosotros; también tienen sus problemas y preocupaciones y además, cargan con las de la feligresía. Aprendamos a dar el amor del Señor empezando por ellos y si en algo podemos servirles, hagámoslo. Merecen nuestra atención, respeto y cariño.

Amado Señor: hoy venimos ante Ti a poner a tus pies a nuestros pastores y líderes de nuestra iglesia. Te pedimos perdón porque solamente hemos querido recibir, pero no hemos aprendido a dar y ellos están en nuestro olvido. Te damos gracias por sus vidas, por sus ministerios y sus familias. Gracias, bendito Señor por sus vidas; llénalos de tu presencia y recárgalos de mucha energía, salud, bienestar y prospera no solamente su área financiera, sino también toma el área física, espiritual y emocional. Gracias, bendito Señor por tenerlos como fieles instrumentos Tuyo y utilizarlos en la propagación del Evangelio. Gracias, gracias, bendito Señor y Dios nuestro.

Un abrazo y bendiciones.

Siempre estás disponible para mí

 Que el Señor te responda cuando estés angustiado; que el nombre del Dios de Jacob te proteja. 

Salmo 20:1. NVI.

Lectura: Salmo 20:1-9.  Versículo del día: Salmo 20:1.

MEDITACIÓN DIARIA

¿A quién nos dirigimos en tiempo de angustia? El único que tiene el poder de sacarnos adelante, de restaurarnos y de devolvernos la paz, es el Señor Jesús. Él es como me enseñaron en mis primeros años de cristiana: el portador del teléfono rojo de emergencias. ¿Y cuál número marcar? Jeremías 33:3: “Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces” (RVR 1960). Es Él quien recibe todas las llamadas de SOS.  Así que no dudemos en utilizar ese teléfono.

Amado Señor Jesús: Gracias te doy porque siempre estás disponible para mí. Gracias porque puedo dirigirme a Ti cuando estoy angustiada, con la certeza de que me vas a responder. Gracias, mi Jesús por tanto amor ofrecido; gracias porque Tú borras todas mis ofensas y vuelves a abrirme tus brazos amorosos cuando caigo y vuelvo a Ti arrepentida. ¡Te amo mi Jesús! Gracias, muchas gracias, buen Señor.

Un abrazo y bendiciones.

¡Para mi Juanita hermosa!

 

Los nietos son la corona de gloria de los ancianos; los padres son el orgullo de sus hijos 

Proverbios 17:6. NTV.

Lectura: Proverbios 17:1-7.  Versículo del día: Proverbios 17:6.

MEDITACIÓN DIARIA

¡Qué bonito versículo del día! Casi todas las versiones dicen al respecto, que los nietos son la corona de los viejos. Y digo que bonito porque a la edad madura ya se pueden ufanar las personas de sus logros profesionales, de sus riquezas, de sus talentos, de sus viajes, pero ninguna de estas se lleva la corona que se llevan los nietos. Cuando supe que venía mi primera nietecita, mi corazón volcó de alegría. Recuerdo que estaba en una clase de computación y al saber la noticia en mi teléfono no pude dejar de gritar feliz por el acontecimiento que pronto vería. Mi amiga Sonia que estaba a mi lado, me preguntó y por supuesto me felicitó. ¡Bien recuerdo ese día! Llegaste a coronar como una reina; con risas, cantos, bailes y destrezas que sólo Tú sabes ofrecer para levantar nuestros ánimos caídos. ¡Cómo corre el tiempo! Pero para mí, mi pequeña mujercita, seguirás siendo mi preciosa Muñequita y ¡qué bien te llevas la corona!, porque después de ti han llegado a ese pedestal tres hermosos príncipes, pero la corona de la reina, la sigues portando airosa solamente tú. Mi Juanita, oro a Papito Dios para que a medida que crezcas, crezcas también en estatura, en gracia y en sabiduría delante de Él y de los hombres. ¡El Señor Jesús te bendiga hermosa Muñequita! ¡Te amo con todo mi corazón y esto es para ti!

Bendito Jesús: toma la vida de Juanita y sé moldeándola como sólo Tú lo sabes hacer. Permite que Juanita nunca se aparte de Ti; que siempre lleve impregnado en su corazón tu Palabra que es verdad y luz en su camino. Recuerda Juanita, que el Señor nuestro Dios es el único Señor. Ámalo con todo tu corazón, con toda tu alma y con todas tus fuerzas. Grábate en el corazón su Palabra; habla de ella cuando estés en tu casa y cuando vayas por el camino, cuando te acuestes y cuando te levantes.  Átalas a tus manos como un signo, llévalas en tu frente como una marca y escríbelas en lo profundo de tu corazón. ¡Gracias, gracias mi Señor por su vida!

Un abrazo y bendiciones.

Orando por el presidente Donald Trump

 Recomiendo que se ore por los gobernantes y por todas las autoridades, para que podamos vivir en paz y tranquilos, obedeciendo a Dios y llevándonos bien con los demás.

1 Timoteo 2:2. TLA.

Lectura: 1 Timoteo 2:1-7.  Versículo del día: 1 Timoteo 2:2.

ORACIÓN

Bendito Señor, de acuerdo con el mandato de tu Palabra, vengo a Ti para poner en tus manos al Presidente de los Estados Unidos de América Donald Trump. Gracias te doy por su vida; guárdalo y protégelo de las acechanzas del maligno. Permite que gobierne con equidad y justicia; ilumínalo con tu Santo Espíritu; llénalo de tu sabiduría, dale el discernimiento necesario en las decisiones que tiene que tomar y a la vez fortalécelo para que pueda guiar a este país como Tú deseas que se haga. Te ruego Señor que tomes su gobierno y que seas Tú mismo a través de él, dirigiendo los pasos de este gran estado. Que esta tierra vuelva a sus raíces cristianas en donde se levantó como nación independiente, libre y soberana. Reconozco Señor que la autoridad es Tuya y Tú la delegas en mandatarios y gobernantes; gracias, porque fuiste Tú quien quisiste que él llevara las riendas de este país; gracias, bendito Jesús. Gracias por su familia, por el vicepresidente, por el personal administrativo de su gabinete y por sus asesores. Esta nación te pertenece; y como me enseñaron de pequeña: -que en sus campos florezcan las guirnaldas de fraternidad y que siempre en su suelo brille el sol de libertad-. ¡Dios salve a Estados Unidos de América, tierra de paz!

Un abrazo y bendiciones. 

Definitivamene necesito ser como Tú

 El Señor dirige nuestros pasos, entonces, ¿por qué tratar de entender todo lo que pasa? 

Proverbios 20:24. NTV.

Lectura: Proverbios 20:1-30.  Versículo del día: Proverbios 20:24.

MEDITACIÓN DIARIA

Así es; si el Señor nos dice que nuestros caminos y pensamientos no son los de Él (Isaías 55:8-9), ¿cómo vamos a entender lo que nos pasa a diario? Sus caminos y pensamientos son más altos que la tierra y como dice la canción: ‘porque en esta vida hay cosas que pasan que yo no entiendo’. Por eso necesito tener el carácter de Cristo; ¡necesito ser como Tú, Jesús amado!

Gracias, mi Señor Jesús por recordarme que el Dueño de mi vida con todos sus pormenores de elevadas y caídas Eres Tú. Gracias porque cada paso que doy, Tú ya lo sabes y sabes las palabras que voy a pronunciar aún antes de decirlas. Siendo todo de este modo mi Señor, ¿por qué tratar de entender todo lo que pasa? Todo lo mío te pertenece: mis pensamientos, mi voluntad, mi intelecto e incluso mis decisiones ya las conoces. Sin embargo, quiero decirte mi buen Señor que muchas cosas de estas ni las entiendo ni las sé digerir. Gracias mi Jesús, porque por eso a Ti te gusta que tengamos la mente como la de los niños, sin pensarlo tanto; me declaro impotente mi Señor, sé que dependo totalmente de Ti. Dame humildad y sinceridad mi Señor para expresarme con el mismo amor Tuyo. No permitas que nada ni nadie invada mis pensamientos; mi vida entera te pertenece; yo quiero menguar para que crezcas Tú y así ser más como lo Eres Tú. ¡Te amo mi Señor!

Un abrazo y bendiciones.

Tu gran amor Señor, perdura para siempre

 

El Señor cumplirá en mí su propósito. Tu gran amor, Señor, perdura para siempre; ¡no abandones la obra de tus manos! 

Salmo 138:8. NVI.

Lectura: Salmo 138:1-8.  Versículo del día: Salmo 138:8.

ORACIÓN

Si mi Señor, quiero alabarte de todo corazón y cantar Salmos a tu Nombre. Gracias, muchas gracias, bendito Señor. Gracias por mi esposo, por cada uno de mis hijitos, sus cónyuges y por mis preciosos Muñequitos. Gracias por mi querido hermano, su esposa y todos mis sobrinos con sus familias. Gracias por todos mis primos y sus familias, todos son importantes para mí y te clamo por ellos de una manera especial. Gracias por las lindas amistades que me has regalado; son amigo(a)s, invaluables. Señor, me has rodeado de personas de alta estima para mí y te doy gracias por ello. Gracias por mis pastores de Broward y mis pastores de Colombia. Gracias, mi Señor por tu amor y fidelidad; gracias porque me infundes ánimo y renuevas mis fuerzas. Aunque pase por grandes angustias, Tú me darás vida. Gracias porque bien sé que cumplirás tu propósito en mí. Tu gran amor Señor, perdura para siempre. Por favor ¡no abandones la obra de tus manos! Sígueme moldeándo de acuerdo con tu santa voluntad. ¡Alabo y exalto tu Nombre Jesús! ¡Tu gran amor, perdura para siempre! ¡Y yo también te amo mi Jesús!

Un abrazo y bendiciones.

¡Un año más para Ti mi Buen Jesús amado!

 Ya te lo he ordenado: ¡Sé fuerte y valiente! ¡No tengas miedo ni te desanimes! Porque el Señor tu Dios te acompañará dondequiera que vayas. 

Josué 1:9. NVI.

Lectura: Josué 1:7-9.  Versículo del día: Josué 1:9.

ORACIÓN

Un día más, una semana más, un mes más, un año más. Aquí estoy mi Señor; dando nuevamente una vuelta en esta tierra donde has querido que esté. Gracias porque tus ojos vieron mi cuerpo en gestación. Tú me formaste en el vientre de mi madre. ¡Te alabo porque soy una creación admirable! Todos mis días se estaban diseñando, aunque no existía uno solo de ellos. ¡Cuán preciosos, oh Dios, me son tus pensamientos! ¡Cuán inmensa es la suma de ellos! El diseño de tus días todavía sigue su curso y aquí estoy mi Señor. Protégeme como a la niña de tus ojos; escóndeme bajo la sombra de tus alas. Gracias, mi Señor, porque sé que en los años que me quedan por recorrer, vas conmigo llevándome de tu mano. Toma mi vida entera Señor; toma mis sueños, mis anhelos; toma aun mis cargas, tristezas, desilusiones. Tal como me conoces, bien me dices: Dora, ya todo está escrito; ¡sé fuerte y valiente! ¡No tengas miedo ni te desanimes! Porque Yo, tu Señor y tu Dios, te acompañaré dondequiera que vayas. Gracias por recordarme que sea valiente, que no tema, que no me desanime, que a mi lado siempre estarás y que me sigues amando tanto, como en el momento en que resolviste diseñarme. ¡Un año más para Ti mi Jesús amado! Gracias, muchas gracias, buen Señor. ¡Te amo mi Señor, mi Jesús, mi Dios, mi Creador, mi Roca fuerte!

Un abrazo y bendiciones.

En el cielo tendremos la mejor mansión

 No dejen que el corazón se les llene de angustia; confíen en Dios y confíen también en mí. En el hogar de mi Padre, hay lugar más que suficiente. Si no fuera así, ¿acaso les habría dicho que voy a prepararles un lugar? 

Juan 14:1-2. NVI..

Lectura: Juan 14:1-7.  Versículos del día: Juan 14:1-2.

MEDITACIÓN DIARIA

¡Qué promesa tan hermosa y gratificante es saber que nuestro buen Señor ya está preparándonos un lugar especial en el cielo! Y miremos lo que nos dice el versículo siguiente: “Cuando todo esté listo, volveré para llevarlos, para que siempre estén conmigo donde yo estoy” (v. 3 en la lectura). ¡Oh esto es más que amor como solo lo puede dar nuestro buen Señor y Dios! Estas palabras del Señor rebasan nuestra comprensión. ¿Hasta dónde llega su sublime amor? Él mismo se fue a prepararnos una linda mansión para tenernos siempre con Él.

Amado Señor Jesús: Tú, únicamente Tú, no solamente nos amas al punto de dar tu vida por cada uno de nosotros, sino que además de ese regalo maravilloso, vas al hogar del Padre a prepararnos una mansión y llevarnos por siempre a tu lado. Gracias, gracias, buen Señor por darnos tanto amor. Gracias por esa morada que nos estás preparando. Seguro que es la más hermosa que jamás hayamos visto. Gracias, gracias, bendito Jesús.

Un abrazo y bendiciones.

Jesús: tu ley te convierte en lo más deseable y dulce

Son más deseables que el oro, más que mucho oro refinado; son más dulces que la miel, la miel que destila del panal. 

Salmo 19:10 NVI.

Lectura: Salmo 19:1-14.  Versículo del día: Salmo 19:10.

MEDITACIÓN DIARIA

¿Qué es más deseable y refinado que el oro y más dulce que la miel? Miremos los versículos anteriores: “La Ley del Señor es perfecta:  infunde nuevo aliento. El mandato del Señor es digno de confianza: da sabiduría al sencillo. Los preceptos del Señor son rectos: traen alegría al corazón. El mandamiento del Señor es claro: da luz a los ojos. El temor del Señor es puro: permanece para siempre. Las ordenanzas del Señor son verdaderas: todas ellas son justas” (vv. 7-9). Todo lo que el Señor nos manda, dígase ley, mandato, precepto, mandamiento, ordenanza o reverencia nos reavivan el alma porque son confiables; traen alegría al corazón, nos dan luz a los ojos, son verdaderas y todas justas; todo esto para demostrarle al Señor un temor puro y reverente; todo encierra lo que es nuestro Jesús. Así que no desechemos ninguna de ellas porque las necesitamos en nuestro diario vivir. ¡Son más deseables que el oro y más dulces que la miel! Y convierten al Señor también en lo más deseable y dulce que tenemos.

Amado Señor Jesús: gracias por permitirnos conocerte al punto que Eres lo más deseable y dulce que hemos podido encontrar. Gracias, gracias, mi Jesús. Definitivamente sin Ti no somos nada ni valemos nada. Eres Tú quien nos enseñas tu Palabra para vivir de acuerdo con tu verdad. Si en algún momento nos alejamos, por favor vuelve a rescatarnos y envuélvenos en tus brazos amorosos y misericordiosos. Por favor nunca admitas que nos separemos y que esto llegue a suceder. Igual que David no nos dejes pecar a sabiendas ni permitas que el pecado nos domine. ¡Oh Señor, Roca y Redentor nuestro! ¡A Ti sea todo honor, honra y gloria por los siglos de los siglos!

Un abrazo y bendiciones.

Nos corresponde llevar las Buenas Nuevas de Salvación

Pues ustedes saben muy bien que el día del regreso del Señor llegará inesperadamente, como un ladrón en la noche.  Cuando la gente esté diciendo: ‘Todo está tranquilo y seguro’, entonces le caerá encima la catástrofe tan repentinamente como le vienen los dolores de parto a una mujer embarazada; y no habrá escapatoria posible.  

1 Tesalonicenses 5:2-3. NTV.

Lectura: 1 Tesalonicenses 5:1-11.  Versículos del día: 1 Tesalonicenses 5:2-3.

MEDITACIÓN DIARIA

Muchos predicadores teólogos afirman que ya es el tiempo del regreso del Señor, pero a ciencia cierta nadie lo sabe. El mismo Señor Jesús lo dijo: “Sin embargo, nadie sabe el día ni la hora en que sucederán estas cosas, ni siquiera los ángeles en el cielo ni el propio Hijo. Solo el Padre lo sabe” (Mateo 24:36. NTV). El caso es que debemos de estar vigilantes sea que sí o sea que no. Debemos estar haciendo la voluntad del Señor y personalmente creo que la voluntad del Señor está arraigada con el compartir las Buenas Noticias de salvación a diestra y siniestra; a tiempo y a destiempo. Y “Esta es la palabra de fe que predicamos: que si confiesas con tu boca que Jesús es el Señor y crees en tu corazón que Dios lo levantó de entre los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para ser justificado, pero con la boca se confiesa para ser salvo” (Romanos 10:8-10 NVI). El Señor no quiere que nadie se condene, sino que el hombre llegue al arrepentimiento y le busque. Ese es mi propósito al enviar mis devocionales. Al menos poner un granito de arena en la evangelización del mundo. Te sugiero que también busques la manera de hacerlo. El Señor estará muy complacido contigo.

Amado Señor Jesús: muchas gracias por tu Palabra que es verdad. Verdad que todos debemos conocer y además darla a conocer. Permite mi buen Jesús que toda persona que lea este devocional, te entregue su corazón para que seas Tú el Señor y Salvador de su vida. Permite que te abran la puerta y te dejen seguir para que seas Tú mismo guiando y llevando a esa persona por el camino que deseas que ande. Yo te doy gracias por su vida y ruego para que siempre esté de tu mano. Gracias, muchas gracias bendito Señor y Dios. ¡Te amamos!

Un abrazo y bendiciones.

Eres mi mejor herencia, mi copa, mi porción deseada

Tú, Señor, eres mi herencia y mi copa; eres tú quien ha afirmado mi porción. Bellos lugares me han tocado; ¡preciosa herencia me ha correspondido! Bendeciré al Señor, quien me aconseja; aun de noche mi corazón se instruye. 

Salmo 16-5-7. NVI.

Lectura: Salmo 16:1-11.  Versículos del día: Salmo 16:5-7.

MEDITACIÓN DIARIA

Estuve leyendo un librito pequeño, aunque no lo terminé, del Hermano Lawrence, quien fue un monje católico que vivió en el siglo XVII d. C. y servía como cocinero en el monasterio de la orden de los Carmelitas Descalzos en Paris, Francia. Él constantemente buscaba la presencia de Dios en todos sus asuntos cotidianos y descubrió que ese era el secreto para cultivar la santidad, mediante la práctica de la presencia de Dios. Me gustó y me identifiqué con él, porque siempre he pensado que el Señor siempre está en todos nuestros asuntos por pequeños o insignificantes que los veamos y entonces podemos hablar con Él incluso de lo mismo que estamos haciendo. Ahora leyendo los versículos del día, más puedo reafirmar que así es. El Señor se convierte en nuestro amigo, confidente, líder, Él es la bella porción que me ha tocado; la mejor herencia que me ha correspondido y que así sea de noche está listo para aconsejarme e instruirme. Él es mi porción deseada.

Mi Amado Señor Jesús: gracias por que Eres mi todo; mi mejor porción. Eres en quien puedo refugiarme sin pensar que te voy a incomodar o que me vas a desechar. Gracias mi buen Jesús; es tan dulce hablar Contigo y saber que escuchas sin interrumpir. Es tan agradable verte y saber que estás ahí. Tú Eres todo lo que más deseo; no sé si estará cerca tu regreso o si todavía tardarás, pero sí segura estoy que mis ojos te verán y podré saber que jamás nada de Ti me separará. Eres mi esperanza, Eres el anhelo de mi corazón, Eres el sol que se levanta en las mañanas y la luna que se esconde en el atardecer. Eres mi noche, mi día. Sin Ti, mi vida no tiene sentido alguno. Gracias, muchas gracias por amarme tanto buen Jesús. ¡Te alabo, te adoro, te exalto, te doy toda la gloria, la honra y el honor; sólo Tú Eres digno de recibir toda adoración! ¡Aleluya!

Un abrazo y bendiciones.

Gracias por amarme tanto mi Jesús

Cuando Israel era niño, yo lo amé, …, pero cuanto más lo llamaba, más se alejaba de mí… Yo mismo le enseñé a Israel a caminar, llevándolo de la mano; pero no sabe ni le importa que fui yo quien lo cuidó. Guie a Israel con mis cuerdas de ternura y de amor. Quité el yugo de su cuello y yo mismo me incliné para alimentarlo. 

Oseas 11:1-4.

Lectura: Oseas 11:1-13.  Versículos del día: Oseas 11:1-4.

MEDITACIÓN DIARIA

Cambia la palabra Israel por tu nombre. Es el Señor mismo que te ama tanto y que sufre por tu indiferencia. “Oh, Israel, ¿cómo podría abandonarte? ¿Cómo podría dejarte ir?... Mi corazón está desgarrado dentro de mí y mi compasión se desborda” (v. 8 en la lectura). Si conociste al Señor y lo has olvidado, mira cuánto te ama. El Señor espera por ti; vuélvete a Él; no lo pienses más ni le des más vuelta a tu decisión. El Señor espera por ti porque te ama. Déjate envolver en sus cuerdas de ternura y de amor.

Amado Jesús: Gracias por amarme tanto. Gracias por cuidarme aún en los momentos que menos los espero. Mi Jesús, sé cuánto sufres por mí. Gracias por amarme tanto, caminar a mi lado tomando mi mano y muchísimas veces inclinándote para alimentarme. Todo eso lo sé muy bien mi Señor y no tengo palabras para agradecerte tanto. Tú Eres mi Dios que te bajas hasta mí siendo yo un simple mortal y sin embargo me buscas vez tras vez solo por amor. Mi Jesús deseo agradarte, hacer tu voluntad. Utilízame, Señor, para que tu obra se expanda cada día más y sean muchos los que lleguen a tu reino celestial. ¡Te amo buen Jesús!

Un abrazo y bendiciones.

Pidamos sabiduría para hablar solamente lo necesario

 Hablar demasiado conduce al pecado. Sé prudente y mantén la boca cerrada. 

Proverbios 10:19. NTV.

Lectura: Proverbios 10:1-32.  Versículo del día: Proverbios 10:19.

MEDITACIÓN DIARIA

Sería muy bueno leer todo este capítulo de Proverbios porque hay muchos versículos que nos instan a tener la boca cerrada. Es la mejor manera de no acarrear discusiones y problemas. Pongamos en práctica el ser prudentes; sé que a veces no es fácil, pero pidámosle ayuda al Espíritu Santo y Él sin duda alguna intervendrá.

Señor Jesús: bien sabemos que hemos pecado muchas veces por mover más de la cuenta nuestra lengua. Te pedimos perdón por ello y permite que el Precioso Espíritu Santo tome el control de nuestra lengua para no hablar sandeces y pecar con nuestra boca. Mi Señor gracias por permitirnos aprender cada día más de tus enseñanzas, lo que nos llevará a tener relaciones armoniosas y no perder la paz. Te entregamos todas nuestras relaciones familiares, de la Iglesia, de amistades o de trabajo, para que seas Tú mismo ministrando en nuestras vidas y a través de tu Santo Espíritu nos llenemos de sabiduría al hablar con cada uno de ellos. Gracias, muchas gracias, bendito Señor y Dios nuestro. ¡Te adoramos!

Un abrazo y bendiciones.

Cumplir el nuevo mandato

 Este mandamiento nuevo les doy: que se amen los unos a los otros. Así como yo los he amado, también ustedes deben amarse los unos a los otros. De este modo todos sabrán que son mis discípulos, si se aman los unos a los otros. 

Juan 13:34-35. NVI.

Lectura: Juan 13:31-38.  Versículos del día: Juan 13:34-35.

MEDITACIÓN DIARIA

Este mandamiento que el mismo Señor Jesús nos deja es clave para aprender a vivir una vida armoniosa y es que definitivamente como dice el Proverbio: “el amor cubre todas las faltas” (Proverbios 10:12.). Así que empecemos a amar de tal manera que ese amor sea el motor de nuestra fe y todo lo que hagamos tenga impregnado el sello del amor. El amor de Dios en nosotros se ve reflejado en el amor a nuestro prójimo. Es la manera más sencilla de ofrecerlo y a la vez la más difícil de cumplir. Pero aún hay una cosa más difícil todavía: amar a los enemigos. “Han oído la ley que dice: Ama a tu prójimo y odia a tu enemigo. Pero yo digo: ¡ama a tus enemigos! ¡Ora por los que te persiguen!”; “Si solo amas a quienes te aman, ¿qué recompensa hay por eso? Hasta los corruptos cobradores de impuestos hacen lo mismo. Si eres amable solo con tus amigos, ¿en qué te diferencias de cualquier otro? Hasta los paganos hacen lo mismo” (Mateo 5:43-44 y 46-48). Por eso, personalmente creo que el amor, lo abarca todo. Cumplamos con el mandamiento.

Amado Señor Jesús: Gracias por el nuevo mandato dejado por Ti. Enséñame Señor a amar tal como lo hiciste por mí. Que el verdadero amor ofrecido sea de la misma calidad del Tuyo brindado. Quiero dar el amor que todo lo disculpa, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta; el amor que no se enoja fácilmente y que no guarda rencor. Bendito Señor, ese es el amor que te pido pongas en mi corazón. Te doy gracias, Jesús, porque sé que me amas de ese modo. ¡Deseo amar a mi prójimo de esa manera! Gracias, muchas gracias mi buen Señor.

Un abrazo y bendiciones.

¡Cuánto te amo Señor, fuerza mía!

¡Cuánto te amo, Señor, ¡fuerza mía!  El Señor es mi roca, mi amparo, mi libertador; es mi Dios, la roca en que me refugio. Es mi escudo, el poder que me salva, ¡mi más alto escondite! 

Salmo 18:1-2. NVI.

Lectura: Salmo 18:6 y 25-36, Versículos del día: Salmo 18:1-2.

MEDITACIÓN DIARIA

“En mi angustia invoqué al Señor; clamé a mi Dios por ayuda. Él me escuchó desde su Templo; ¡mi clamor llegó a sus oídos!” (v. 6 en la lectura). Así es; el Buen Señor está atento a nuestras oraciones y clamores, Para el Señor nada de lo que nos pasa, sea bueno o malo le es indiferente. El Señor siempre está al tanto de sus hijos y esto me llena de valor porque literalmente Él es mi fuerza, mi roca, mi amparo, mi más alto escondite.

Sí Señor ¡Cuánto te amo fuerza mía! Definitivamente, tenerte a Ti lo abarca todo. Gracias, muchas gracias, bendito Señor y Dios mío. No hay nadie más en quien pueda refugiarme y buscar ayuda. Gracias porque tu camino es perfecto. Eres la Roca, Eres quien me armas de valor en mi caminar diario. Eres el más alto escondite donde puedo ir a refugiarme sin temor alguno. ¡Oh mi Jesús! ¿Qué sería de mí si no te tuviera a Ti? Gracias por venir un día a mi vida y quedarte por siempre a mi lado. Eso no tiene comparación alguna; y aparte de eso, me tienes guardada una hermosa morada en el cielo para continuar allí por toda la eternidad sin separarme de Ti. Gracias, gracias, mi Señor por tanto amor ofrecido sin yo merecerlo. ¡Cuánto te amo, Señor! ¡Fuerza mía!

Un abrazo y bendiciones.

Sí, sí; pongamos las cosas en orden

 

¡Lávense, límpiense!  ¡Aparten de mi vista sus obras malvadas! ¡Dejen de hacer el mal! ¡Aprendan a hacer el bien! 

Isaías 1: 16-17a

Lectura: Isaías 1:1-20.  Versículos del día: Isaías 1:16-17a

MEDITACIÓN DIARIA

Muy buena la exhortación del profeta Isaías para el pueblo del Señor. Más adelante nos dice: “Pongamos las cosas en claro dice el Señor. Aunque sus pecados sean como escarlata, quedarán blancos como la nieve. Aunque sean rojos como la púrpura, quedarán como la lana” (v. 18)

El amor del Señor es tan grande, que nos llama a lavarnos; o sea a confesar nuestros pecados, con actitud sincera. Queriendo hacer las cosas bien, dejando atrás toda ira, todo enojo, todo resentimiento, toda falta de perdón y teniendo muchísima misericordia y amor. Empezando este nuevo año pongamos las cosas en orden, como nos lo está mandando el Señor.

Mi amado Señor Jesús: vengo ante Ti para que seas Tú a través del precioso Espíritu Santo permitiéndome reconocer toda falla, todo pecado que aun haya olvidado hacer. Quiero presentarme y comenzar este nuevo itinerario completamente ligada a tu Presencia. Que nunca se me olvide todo lo que hiciste por mí y sigues haciendo porque cada vez que tienes que pulirme es porque sabes cuánto lo necesito. Gracias mi Señor; tanto tallar este molde duele mucho. Sí, sí, duele más de lo que yo misma podía imaginar. Sin embargo, te doy infinitas gracias porque reconozco que es tu amor que me está formando a la estatura que me quieres ver. Hoy oro mi Señor por toda mi familia empezando por mi esposo, llena toda su vida de buena y suficiente salud, Gracias por mis tres hermosos hijitos y sus hogares. Oro para que en cada hogar de ellos reine el amor, la comprensión, la tolerancia, el respeto, la cordialidad y la amabilidad. Que también se llenen de misericordia para enfrentar los problemas que surgen en toda relación y sepan perdonar. Que te digo de esos cuatro preciosos Muñequitos mi Señor: son tan bellos, tan inocentes, tan juguetones; que de verdad son la más linda corona que me has regalado en mis años dorados. Oro por ellos Señor mío, guárdalos, cuídalos, no permitas que el enemigo se vaya contra ellos. Te ruego que en todo camino pongas un cerco de protección con tus ángeles alrededor de ellos. De mí, que te puedo decir: mi vida entera te pertenece. Gracias, gracias, mi buen Jesús. Infinitas gracias te doy y alabo tu Nombre por siempre.

Un abrazo y bendiciones.

Ofrécele a Jesús tu misma vida

Cuando llegaron a la casa, vieron al niño con María, su madre, y postrándose lo adoraron. Abrieron sus cofres y presentaron como regalos: oro, incienso y mirra. 

Mateo 2:11. NVI.

Lectura: Mateo 2:1-12.  Versículos del día: Mateo 2:11.

MEDITACIÒN DIARIA.

Los sabios de Oriente le presentaron regalos al Señor Jesús de oro, incienso y mirra. Oro como Rey; incienso como Dios y mirra como Hombre. ¿Qué deseas ofrecerle tú al Rey de reyes y Señor de señores? Recuerda que el Niñito Jesús vino al mundo para salvarnos. Cuando Él fue adulto cumplió su ministerio aquí en la tierra, con el fin de rescatarnos del fuego del infierno; por eso sufrió y murió en esa cruenta cruz. Todo lo hizo por amor y ahí estabas tú incluido. Jesús está llamando a la puerta de tu vida: “¡Mira! Yo estoy a la puerta y llamo. Si oyes mi voz y abres la puerta, yo entraré y cenaremos juntos como amigos” (Apocalipsis 3:20. NTV). Si no sabes qué darle, ofrécele tu vida; el Señor estará orgulloso de contarte entre sus amigos y de saber que, si le dices sí, te tendrá por siempre en su reino. Te puedo sugerir una corta oración. Ten en cuenta que orar es hablar con Dios; yo te puedo sugerir, pero si deseas decirle algo muy personal puedes guiarte por esta, que te comparto:

Señor Jesús: entiendo que me amas y que moriste en mi lugar. Hoy quiero pedirte perdón por mis pecados y decirte que acepto la invitación que me haces para venir a vivir conmigo. Te entrego el trono de mi vida que yo manejo y te recibo como mi Señor y Salvador; hazme la persona que deseas que yo sea. Gracias por todo lo que hiciste por mí y gracias por darme la vida eterna a tu lado. Amén.

Un abrazo y bendiciones.

Señor: no importa que lleguen los años si estás conmigo

 Algunos llegamos hasta los setenta años, quizás alcancemos hasta los ochenta, si las fuerzas nos acompañan. Tantos años de vida, sin embargo, solo traen problemas y penas: pronto pasan y volamos. 

Salmo 90:10. NVI.

Lectura: Salmo 90:1-17.  Versículo del día: Salmo 90:10

MEDITACIÓN DIARIA

ORACIÓN

¡Ay, mi Señor! Sí; a veces se me antoja que la vida está llena de problemas y penas. Gracias a Ti, los días pasan volando y lo más hermoso es que como dice el versículo del día: ‘volamos’. ¡Debe ser maravilloso estar allá Contigo mi Señor! Pensar en ese día, trae gran gozo a mi corazón; pero mientras llega, hazme entender que la vida es corta para así vivirla con sabiduría. Mi Señor, a veces creo que es muy larga cuando estoy agobiada y por más que deseo verter mis lágrimas en tu redoma, tal pareciera que estas no quieren entrar allí. ¡Oh, buen Señor! Hay cargas que me pesan demasiado. Te doy gracias por estar conmigo; ¡no sé lo que sería mi vida sin Ti! Gracias bendito Jesús por ser mi fortaleza, mi roca, mi escondedero seguro en quien puedo refugiarme ¡Te amo mi buen Señor Jesús!

Un abrazo y bendiciones.