Hace mucho tiempo se me apareció el Señor y me dijo: Con amor eterno te he amado; por eso te he prolongado mi fidelidad.
Jeremías 31:3. NVI.
Lectura:
Jeremías 31:1-6. Versículo del día:
Jeremías 31:3.
MEDITACIÓN
DIARIA
Esta
Palabra del Señor, es directamente para ti. Dios te ama tanto, que espera por
ti; te ha amado con amor eterno. Otras versiones dicen: “con amorosa bondad te
he atraído a mí!” (NBV); o “Por eso nunca dejaré de tratarte con bondad” (TLA).
El caso es que el Señor espera por ti; Él no quiere que ninguno se pierda, sino
que todos lleguen al arrepentimiento (2 Pedro 3:9), ahí estás incluido tú.
Mira,
Dios en su infinito amor envió a Jesús al mundo a morir por tus pecados. En
Cristo tienes una nueva vida que puedes empezar a gozar desde el mismo instante
en que decides aceptarlo como Señor y Salvador. Si te parece te puedo sugerir
una corta pero sincera oración; dile así:
Señor
Jesús: sé que moriste por mis pecados y entiendo que me amas con amor eterno y
esperas por mí. Hoy decido decirte que tomes el control del trono que yo manejo
y vengas a morar conmigo. Te abro la puerta de mi vida y te acepto como mi
Señor y Salvador; hazme la persona que deseas que yo sea. Gracias porque tu
sangre me limpia de todo pecado y gracias por darme la vida eterna a tu lado.
Amén.
Un abrazo y bendiciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario