¡Levántate, Señor! ¡Levanta, oh Dios, tu brazo! ¡No te olvides de los indefensos!
Salmo 10:12. NVI.
Lectura: Salmo
10:1-18. Versículo del día: Salmo 10:12.
MEDITACIÓN DIARIA
Sí; al parecer esa es mi
oración cuando sé que los malvados se confabulan con los niños. Le digo al
Señor que no lo permita porque los niños le pertenecen a Él. Sin embargo,
cuánta maldad se trama contra los pequeñitos que son indefensos. Lo triste
también es que se sabe que las mismas madres entregan a sus niñas a hombres
depravados, a cambio de un dinero para su manutención. ¡Eso parte el alma!
¿Hasta dónde ha llegado la maldad del hombre?
Bendito Señor
Jesús: hoy, este Salmo me hace reflexionar y pensar específicamente en los
niños. Los niños del mundo entero que ahora son el blanco del hombre depravado
y enfermo que quiere que las leyes de países de izquierda se volteen a favor de
ellos, para que libremente puedan abusar de pequeños indefensos y aún de
jovencitos que todavía no alcanzan a discernir tanta maldad. Sí Señor,
¡levántate! ¡Ven Señor y levanta tu brazo poderoso! ¿Por qué han de pensar que
no los llamarás a cuentas? Pero Tú Señor ves la maldad y la aflicción, las
tomas en cuenta y te harás cargo de ellas porque Eres un Dios Justo. Gracias,
buen Dios de justicia y poder. Gracias porque el malvado no quedará sin castigo.
¡Exaltamos tu Nombre sobre toda la tierra! ¡Levántate, Señor! ¡En Ti confiamos,
Aleluya!
Un abrazo y bendiciones.
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