Pido que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre glorioso, les dé el Espíritu de sabiduría y de revelación, para que lo conozcan mejor.Efesios 1:17.
Lectura: Efesios 1:3-23. Versículo del día: Efesios 1:17.
MEDITACIÓN DIARIA
Nuestro Padre nos ha
bendecido con toda bendición espiritual en Cristo (v. 3), y en Él tenemos el
perdón de los pecados por su sangre derramada (v. 7). Aparte de esto, cuando escuchamos el mensaje
de salvación y lo creímos, fuimos marcados con el sello del Espíritu Santo
prometido (v. 13).
El apóstol Pablo como
queriendo que no nos olvidemos de todas estas bendiciones, pide que los suyos
(nosotros), entendamos más, la obra redentora de Cristo y que nos sea revelada
por el Espíritu, la sabiduría necesaria para conocerlo cada día mejor. ¿Y cuál es la sabiduría que tenemos que
pedir? Santiago no habla de la sabiduría que desciende del cielo, “que es ante
todo pura, y además pacífica, bondadosa, dócil, llena de compasión y de buenos
frutos, imparcial y sincera” (Santiago 3:17).
Ésta es la sabiduría que necesitamos; hay que buscarla, hay que pedirla. Revelándose ya el Señor en nuestras vidas, no
nos queda más que ir por el camino dando verdadero testimonio de lo que
conocemos y somos, para que se cumpla el propósito de Dios en cada uno.
Amado Señor: ¡Cuán
incomparable es la grandeza de tu poder en favor de los que creemos! Gracias te
damos por todas las maravillosas bendiciones con las que contamos desde el
momento en que decidimos aceptarte y creer en ti. Permite que tu Santo Espíritu nos llene con su
sabiduría y nos revele lo que desea de nosotros, para dar el mejor de los
testimonios al mundo y que los demás también crean en ti.
Un abrazo y
bendiciones.
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